Seguramente habrás escuchado más de una vez, que si hoy en día no estás en internet, no existes.
Es por ello, que parece necesario tener una página web cuando se va a iniciar una actividad, pero, ¿es realmente necesario?
Implicaciones de una página web
Diseño y desarrollo
Hay quien piensa, que tener una página web significa contratar a un diseñador que la haga, y listo, ya nos podemos olvidar. Realmente, el diseño y desarrollo es la parte más sencilla. Podemos encontrar un diseñador que nos monte la página web por un precio bastante ajustado, siempre en función de nuestras necesidades, evidentemente no es lo mismo una web informativa, que una tienda online.
Pero ahora viene lo complicado…
Posicionamiento
El posicionamiento o visibilidad en buscadores, empieza a complicar la funcionalidad de una página web. Vamos a plantear un ejemplo.
Imaginemos que abrimos un local de fisioterapia en la calle de la Violetera en Madrid. Muy posiblemente, a no ser que seas de la zona, jamás te enterarás de que hay un centro de fisioterapia en esa calle de Vallecas.
Pues con una página web, ocurre algo parecido. Montamos nuestra página web, pero nuestro público, no tendrá ni idea de que nuestra página existe, y para encontrarla, tendremos que apoyarnos o bien en publicidad tradicional, folletos, anuncios, etc. o bien haciendo uso de Google, dado que es el buscador más utilizado en estos momentos.
El problema, es que google tiene sus propios algoritmos de importancia a la hora de mostrar los resultados, así que, si queremos aparecer en las búsquedas tendremos dos opciones, pagar a Google esa publicidad (no sale barato), o conseguir que nuestra página tenga la suficiente relevancia para que su algoritmo nos muestre de forma gratuita en las primeras posiciones (cosa nada fácil si tenemos competencia).
Contenido
Hay distintas estrategias para conseguir que nuestra página obtenga un buen posicionamiento natural en Google, pero la principal será la de ofrecer un contenido que Google considere de interés para nuestro público, lo que nos obligará a tener un Blog o similar, en el que publicar entradas relacionadas con nuestro negocio.
Deberíamos publicar una entrada semanal como mínimo, aunque siempre vale más calidad, que cantidad. Y por supuesto, NO se te ocurra plagiar, no le gusta nada a San Google.
Esta parte, quizá habría que actualizarla, dado que ha llegado la IA, y parece que todo el mundo se ha vuelto loco. Y si, seguramente te puede facilitar mucho la generación de contenidos, pero aun así, yo diría que tendrás que seguir trabajando en ello o buscar a quien lo haga.
Captación de suscriptores
Apoyándonos en nuestro contenido, uno de nuestros objetivos debería ser la captación de suscriptores al contenido que ofrecemos, con el fin de enviarles campañas de mail periódicas, con nuestras últimas entradas, que a su vez aprovecharemos para incluir nuestras ofertas, etc.
Para ello, tendremos que apoyarnos en algún servicio adicional, o bien algún plugin de WordPress o similar. Esto también supondrá un coste adicional en el momento en que tengamos un volumen considerable de suscriptores.
Mantenimiento
Es importante tener en cuenta también, que a no ser que nos decidamos por una web estática, en caso de hacerla con WordPress, Joomla o similares, nuestra página web precisará de un mantenimiento y seguimiento de actualizaciones, etc.
Costes
Evidentemente, tendremos que valorar, y asumir que si queremos sacar partido a nuestra página web, tendrá unos costes importantes, ya sea en dinero o tiempo.
Costes fijos (aproximados)
- Registro y renovación de dominios: desde 12€ por registro y renovación anual.
- Alojamiento: desde 10€ al mes.
- Diseño y desarrollo de la web.
- Mantenimiento (en su caso)
Costes variables
- Redacción de contenidos
- Agencia para mejorar el posicionamiento
- Costes extraordinarios de alojamiento (espacio en disco)
Como habrás podido comprobar, tener una página web tiene multitud de implicaciones que debemos tener en cuenta, salvo que únicamente queramos una web para mostrar nuestros servicios o productos, teniendo claro que la promoción la realizaremos por otra vía.
Esto posiblemente nos lleve a depender de terceros, a los que encargar la gestión de todos estos servicios.
¿Es necesaria la página web?
Evidentemente y una vez más, la respuesta la tienes tu. Dependerá de múltiples factores, y muchas veces, la mejor manera de responder a la pregunta, es ponerse en el lugar de nuestro público.
Por poner un par de ejemplos…
Si tengo una cafetería, muy posiblemente voy a depender de la clientela local, o posibles turistas. Quizá me sea más rentable volcar todos mis esfuerzos en tener buenas reseñas en google maps, Trip Advisor, o similares, que mantener una página web.
Por el contrario, si por ejemplo tengo un alojamiento rural, posiblemente dependeré en gran medida de gigantes como Booking. Pero cada día más clientes buscan el alojamiento en google, después de localizarlo en Booking, porque saben que pueden conseguir un descuento como mínimo de la comisión de Booking.
En definitiva, únicamente tú sabes si precisas una página web. Eso si, si la tienes, trata de que sea vistosa y mantenerla actualizada, lo contrario causa una mala impresión, y podría quitarte clientes en lugar de atraerlos.